La calidad del aire en el lugar de trabajo
El problema con la calidad del aire interior es el mismo que experimentamos en el lugar de trabajo. Se considera más peligroso que el aire exterior.
La mala calidad de aire interior se debe a los materiales y bienes comerciales e industriales de interior que podrían emitir contaminación a la atmósfera. Pasamos mucho tiempo en la oficina, lo que significa, que respiramos constantemente el aire que circula en el edificio. Si el aire es de mala calidad, corremos el riesgo de sufrir problemas de salud que podrían evitarse fácilmente si se lleva a cabo pocas medidas. De ahí la importancia de medir la calidad del aire en el lugar de trabajo.
Controlar y garantizar una buena calidad del aire interior es un factor esencial que debería ser una responsabilidad compartida entre los propietarios y los empleados por motivos de seguridad. ¿Por qué es importante la calidad del aire? La calidad del aire en el lugar de trabajo puede impulsar o potenciar cambios efectivos en cuanto a trabajo.
¿Qué significa la calidad del aire interior (IAQ)?
La calidad del aire interior (Indoor Air Quality, IAQ) describe el impacto del aire que hay dentro de un apartamento, instalación o edificio en la salud de un individuo y su capacidad de ser productivo (rendimiento laboral). Se ha convertido en una preocupación principal para las empresas comerciales, los propietarios de negocios y los empleados, ya que tiene un impacto significativo en la productividad y la capacidad de trabajar y generar ingresos.
Las estadísticas e investigaciones llevadas a cabo por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA) declaran que la contaminación en los interiores es una amenaza más frecuente que puede afectar a cualquier organización comercial, incluso a la oficina más adecuadamente gestionada.
¿Qué puede causar una mala calidad del aire en el lugar de trabajo?
Entre los numerosos, las causas más comunes de la mala calidad del aire son:
Partículas de polvo: El polvo es un contaminante ambiental habitual que puede entrar en la oficina. Sin las medidas adecuadas para mejorar la ventilación, podría circular por la oficina y desencadenar ataques asmáticos o alergias en algunos empleados, provocando el absentismo laboral.
Humedad (moho): Cuando la temperatura exterior desciende, el aire interior se calienta, lo que produce una condensación que podría notarse en las ventanas. Esto provoca una humedad en el aire (aire húmedo), un entorno muy fértil para el crecimiento de moho y hongos. También podría ser causado por daños en el sistema de agua que se han dejado desatendidos. El exceso de humedad en el aire provoca deshidratación, cansancio y aumenta el riesgo de infección.
Contaminantes químicos: Muchos materiales que se encuentran en el edificio de oficinas emiten contaminantes químicos. Entre estos materiales se encuentran los muebles y equipos de oficina, los materiales de construcción, los revestimientos de las paredes y los recubrimientos de los suelos. Todos ellos pueden emitir contaminantes químicos como COV, PBB, formaldehído y CO2 que pueden causar problemas de salud y reducir el rendimiento de los empleados.
¿Cómo se puede detectar la mala calidad del aire interior?
Cuando el aire interior está contaminado, es difícil notarlo. Se esconde detrás de la fachada de fantásticos ambientadores y del aire soplado por los aparatos de aire acondicionado. En cambio, el aire exterior contaminado se puede detectar sin esfuerzo y se puede manejar adecuadamente.
Controlar la calidad del aire interior es muy sencillo. Con la ayuda de monitores AIR8, que miden la presencia de PM, COV, formaldehído y CO2, puede disponer de datos en tiempo real en su oficina.
¿Cómo puede mejorar la calidad del aire en su oficina?
- La oficina debería estar siempre limpia: Mantener la oficina limpia es el primer paso para tener un aire interior de buena calidad. Una oficina limpia significa que se corre menos riesgo de generar polvo, moho o alérgenos. Los productos de limpieza ecológicos son los más recomendables para la limpieza ya que no emiten productos químicos agresivos que puedan desencadenar problemas de salud.
- Se recomienda utilizar dispositivos de limpieza del aire interior: Los purificadores de aire son aparatos que ayudan a purificar el aire y eliminar los contaminantes. Han demostrado ser útiles a lo largo de los años y son eficaces para mantener una buena calidad del aire.
- Hay que mantener una ventilación suficiente: Asegúrese de que todos los sistemas de ventilación del aire están desbloqueados. También deberá asegurarse de la correcta colocación de los muebles y equipos de la oficina, ya que, si se colocan delante de las rejillas de ventilación, la circulación se verá afectada. Lo mejor sería cambiar los filtros de HVAC con frecuencia para que los filtros de aire obstruidos no interfieran con el flujo de aire.
Recapitulación
La responsabilidad de controlar y mantener una buena calidad del aire en la oficina debe ser compartida entre los propietarios y los empleados. De este modo, resulta más fácil de manejar. Sin embargo, equiparse con un purificador de aire es escencial.
Ingrese a nuestra tienda online para conocer nuestros modelos.